GEOMETRIA SAGRADA (2)
Dentro
de un plano más formal o aún académico, la geometría sagrada es considerada por
la comunidad, como parte de las disciplinas sociales que dan la continuidad
matemática para definir el arte y en especial se aposenta en manifestaciones de
la arquitectura de clara aplicación religiosa.
Desde
esta perspectiva, se pueden detectar tres variables fundamentales propias de la
geometría sagrada: la proporcionalidad del diseño, la numerología subyacente en
el proceso de estructuración y el arte supremo propio del lenguaje simbólico
dispuesto en la narrativa.
Desde otra
perspectiva aún más osada o sensible, la geometría sagrada representa una
gramática visual arquetípica o un caudal de ritmos y patrones impresos en la
perfección estética circundante, ya sea por formaciones astrales, rizomas,
estructuras minerales o en nuestra propia genética que engloba aquellos patrones
mediante los cuales el universo se desdobla a sí mismo.
Tales
aspectos se destacan al contemplar las ideas que muestran que sus
manifestaciones representan una especie de destellos o pinceladas del mapa
genético del mismo universo, al de por sí, mostrar el modelo de la evolución auto-replicante
que se muestra desde la fuente infinita de la conciencia, la cual a su vez,
define los trazos que se marcan el desdoblamiento del universo.
Es así
como la difundida creencia que nace de la existencia de un Creador del Universo,
sigue un mapa geométrico que resulta ser compartido por las más diversas
culturas ancestrales y actuales, de aplicación en contextos religiosos, por
ejemplo, los patrones que definirían formas y dimensiones en altares,
catedrales y otros elementos.
Platón
afirmaba que el Creador se ‘geometriza’ continuamente.
Mientras
tanto los mayas entienden que la matemática astral es reflejada también en los
ritmos que guían la naturaleza terrestre, ya que son el conducto apropiado para
dialogar con las deidades y para así lograr decodificar sus invaluables
consejos.
El arte
de la geometría sagrada toma como guía precisamente esos decretos de perfección
natural para replicarlos, como una especie de resonancia matemática de sublime
estética, sobre obras diversas.
Los
egipcios, los celtas, los romanos, los babilonios, los indios y muchas otras
culturas, incluso las más primitivas conocidas, también utilizaron ciertos
preceptos geométricos similares en la práctica de sus respectivas religiones.
Lo anterior, sugiere una esencia claramente
arquetípica y que va más allá de cualquier concepción original establecida por
el hombre para desarrollar este tipo de prácticas.
Lo
anterior, sugiere una esencia claramente arquetípica que va más allá de
cualquier concepción original preestablecida por el hombre para desarrollar
éste tipo de prácticas. Dos de las escuelas más avezadas en éste ejercicio
surgieron una en la cultura budista y otra en la europea.
Por otro
lado, en un claro discurrir se ven otras aplicaciones de la geometría sagrada.
Pitágoras atribuía una naturaleza divina al hecho que una cuerda oscilante fuese
detenida justo a la mitad de su recorrido y produjera la nota de un octavo,
mientras que una proporción de 2:3 produce un quinto perfecto y otra de 3:4
genera un cuarto perfecto y así subsecuentemente.
Además,
éste mismo matemático, filósofo y místico griego de quien poco es lo que se
sabe, adjudicaba a ciertas proporciones armónicas, determinados poderes
curativos que se podían sintonizar en la naturaleza del cuerpo humano y sus
efectos se reconocían por medio de hologramas.
Un holograma es una traducción simbólica directa
de una energía determinada que conlleva su propia frecuencia e implícitamente
porta un mensaje. También se reconoce como un código específico que permite
descifrar una consciencia particular en sí misma.
Cada holograma consiste de un
conjunto de patrones geométricos asociados con un significado. El ajuste y
centrado de la información se percibe a partir del centro del holograma, de
modo que el observador toma contacto con la parte que éste se refleja en sí
mismo, allí donde está conectada la estructura activa de la representación.
La activación es una experiencia
intensiva de reconocimiento de un código implícito en un holograma determinado.
Se obtiene por medio de la mediación activa de la imagen asociada con el sonido.
Cada holograma está construido en
varias capas del subconsciente con el fin de conectarse con una determinada
frecuencia. Algo así como un dial de radio que se utiliza para encontrar la
emisora adecuada. Entonces, al cerrar los ojos y escuchar los tonos musicales,
se estimula el camino que conlleva una especie de viaje fractal. Es entonces cuando
el código hace su trabajo de activar la consciencia.
Fractal es un diseño matemático
que se da y existe en la naturaleza, cuyas proporciones geométricas que se
repiten sin principio ni fin, en todo el Universo. Sus diseños exteriores o
interiores son concebidos por dentro y por fuera del ser humano y además se dan
en todo el reino animal, vegetal y cósmico.
Se trata
de una figura que puede ser representada de manera espacial o plana, pues está
formada por componentes infinitos. Su principal característica consiste en que
su apariencia y el modo en que se distribuye, no varía estadísticamente, aun
cuando se modifique la escala empleada en la observación. Puede decirse que el
cuerpo físico es un entramado infinito de este tipo de patrones.
Las
espirales emergentes de estructuras fractales corresponden a todo lo que se
puede observar en el universo, van desde un protón, a una estrella o a una
galaxia. Tienen en común una geometría y matemática fundamental que las hace
similares en forma y movimiento, pero muy diferentes en tamaño.
Al
enfocar la atención en alguna de las partes del universo, se ven las espirales
que forman parte de las estructuras toroidales que a la vez, emergen de la
estructura fractal del conjunto magno llamado universo, éste último, conformado
como un gigantesco fractal consciente, moldeado en un espacio infinito.
--------------------------------------------------------------------------------------------------------
Fuente: Mi
libro: “UN SENDERO A LONTANANZA”.
Registro de Propiedad
Intelectual DNDA: 10-427-242
Autor:
Daniel García Vanegas.
Dar sus
comentarios a mayorideas@gmail.com
ETIQUETAS:
Geométrico, geometría sagrada, hologramas, fractales, toróides, sólidos, perfiles,
figuras, poliedros regulares, convexos, tetraedro, hexaedro, octaedro, dodecaedro,
Icosaedro, sistemas, ordenamiento, energía, vibración, entidad, existencia.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario