LOS COLORES (III)
“Aunque le
arranques los pétalos, no quitarás su belleza a la flor”. Rabindranath Tagore.
Como se
sabe los colores son los rayos de luz descompuestos por el prisma y reflejados
o emitidos por los objetos que se capta a través de la vista. Esta radiación
luminosa tiene la capacidad de influir de forma positiva o aún negativa.
Por
ahora, haciendo caso omiso de las tonalidades, en términos generales se le
atribuyen a cada uno de los colores ciertas propiedades que están estrechamente
relacionadas con su uso y presencia. Estas son las vibraciones que emiten las
marcadas preferencias de uso por los diferentes colores:
Rojo: Corresponde al elemento
fuego. Es símbolo de pasión intensa, asociada con la sexualidad, aunque
convencionalmente también muestra peligro. Es el más intenso de los colores
cálidos. Representa vitalidad y acción, su presencia ejerce una poderosa influencia
sobre el humor y produce sensación de calor. Es un color muy estimulante que
acrecienta la capacidad de trabajo y la sensualidad, pero además exaspera los
nervios, ya que está muy vinculado a la violencia y estrechamente ligado con el
despertar de la pasión. Su aspecto negativo indica que puede destapar actitudes
agresivas.
Las
principales características asociadas son la sinceridad, al asumir actitudes
extremadamente directas para expresar lo que se siente. Corresponde a personas
a las que les gusta atraer la atención para nunca pasar desapercibidas. Otra de
sus características es el entusiasmo y estar siempre dispuesto a participar de
nuevas aventuras y experiencias. Denota ser innovador y explorador por
naturaleza. Adicional a esto, manifiesta una vocación natural liderazgo que gestionada
de manera apropiada, persigue el logro.
Rosa: Se encuentra en menor
medida, pero siendo un tono tenue del rojo, parece ser que conserva las
propiedades de éste hacia las relaciones sexuales, pero de una forma suave, sin
tanta pasión ni energía, por ello es símbolo de timidez y amabilidad.
Naranja: Representa la alegría,
la juventud y el verano. Como el rojo, es ardiente y brillante. Estimula el
optimismo, la seguridad, la confianza y el equilibrio, pues reduce la fatiga y
acentúa el ritmo respiratorio. Se asocia con la puesta de sol, y transmite
efectos sedantes que actúan sobre los nervios. Aumenta y favorece la capacidad
de concentración, así como desarrolla la atracción. Simboliza la voluntad,
animosidad y los buenos deseos. Ambienta lugares de reunión dedicados al
compartir.
El
anaranjado, caracteriza a personas divertidas y agradables, de gran corazón
emocional y sensible ante la vida. Proyecta el sentido de la equidad y la
justicia, por lo que se asocia con actividades de ayuda, aunque tiende a ser
deprimirte ante situaciones que no se pueden cambiar. El reto radica en que si
se quiere aportar a la construcción de un mundo mejor, resulta clave que ante
todo, el individuo esté bien.
Amarillo: Corresponde al
elemento Tierra. Es el color más luminoso, por ser cálido, ardiente y expansivo
como la luz del sol es un estimulante de emociones fuertes, también se
relaciona con los celos, el temple, la salud, la curiosidad, la amistad y
acerca a la valentía. Genera calidez y alegría. Estimula la visión, la
actividad mental y la creatividad desde el intelecto, con efectos anti-fatiga.
Calma ciertos estados alterados de excitación nerviosa.
Su tono
caracteriza a las personas investigadoras e inteligentes, no necesariamente
estudiosas que se aburren fácilmente si no encuentran conversaciones
interesantes o posibilidades para desarrollar su potencial. Son propensas a
trabajar hasta muy tarde, pues tienen la parte creativa de su cerebro
desarrollada, lo cual hace que la mente permanezca activa y generando ideas,
incluso, muy tarde en la noche. Son divertidas y agudas, pero al mismo tiempo,
satíricas e irónicas, y es justo ahí donde está el principal reto: tolerancia,
esto es, aprender a aceptar y tolerar la manera de pensar de otras personas.
Verde: Corresponde al elemento
Agua. Es el color de la Naturaleza y aunque sus vibraciones son sedantes,
actúan directamente sobre la psique. Es asociado con la esperanza, la
fecundidad, la expectativa de bienestar y el deseo de trascendencia. Color
sedante, hipnótico, anodino, al que se le atribuyen virtudes de ser calmante y
relajante, eficaz ante la excitabilidad nerviosa, el insomnio y la fatiga, pues
disminuye la presión sanguínea, baja el ritmo cardíaco, alivia neuralgias y jaquecas.
Se utiliza para neutralizar los efectos estimulantes de los colores cálidos.
Caracteriza
personas que necesitan marcar límites entre lo que consideran su espacio
personal y el lugar hasta donde pueden llegar los demás, y si bien, disfrutan
de la compañía de otras personas, se abruman cuando estas sobrepasan tus
límites. Son calmadas y organizadas. El reto consiste en comprender que un buen
trabajo no necesariamente depende de la cantidad de tiempo que se invierta en
él, sino que la vida laboral, no consuma el tiempo destinado a la vida
personal.
Azul: Corresponde al elemento
Aire. Como color primario se toma el azul Cian que es un color azul saturado,
de tonalidad media, también llamado aciano, cuya referencia originaria es la
cianina. El tono referente del cian estándar, se encuentra normalizado y
coincide en impresiones de cuatricromía. Simboliza la calma y sobriedad propia
de los colores fríos, transmite seriedad, confianza y tranquilidad. Se le
atribuye la fuerza para desintegrar las energías negativas. Favorece la
paciencia la amabilidad y serenidad, aunque la sobreexposición a sus efectos
produce fatiga o depresión. Se utiliza en la ambientación de espacios que
invitan al reposo.
Por su
amplia cromatografía deriva en diversos matices por ejemplo, azul celeste,
marino e índigo.
Celeste: Es un color cuyas vibraciones tienen poderes curativos, producen un
estado de calma, y es un gran inductor a la espiritualidad. Atrae el
entendimiento, protección, paz y tranquilidad.
Azul
Marino: Es el color del grado máximo de
espiritualidad. Significa la manifestación del espíritu. También se le
considera como un color cómodo y afortunado. Sus vibraciones a menudo producen
relajación, buen humor, ímpetu, constancia etc.
Su
asociación caracteriza a personas confiadas, con imaginación y habilidad para
la comunicación. La narración, la escritura de historias y la expresión y
defensa de ideas propias o ajenas. El reto es establecer límites sanos de
comunicación, para evitar algunos problemas de relacionamiento.
Índigo: Es la denominación tradicional de las variedades oscuras y profundas
del color azul; antiguamente se decía también glasto. Añil o índigo son
asimismo los colores que se perciben en el tono oscuro del espectro dos del
arco iris. La confusión y sinonimia entre añil, índigo y glasto, se debe a que
estos son los nombres comunes de tres plantas de las obtiene un tinte de color
similar por medio del mismo proceso.
Acompaña
a personas optimistas, reservadas, sensibles e interesantes, con un sexto
sentido desarrollado, acertadas en principio. Comprometidas sea en proyectos,
trabajos, tareas, relaciones. El reto supone desarrollar constancia, pues
aunque se involucran con tesón, muchas veces asumen tantas actividades que se
pierde el interés por ellas al poco tiempo y quedan abandonadas. Se requiere
dedicación y constancias.
Violeta: Es el color de los
ascetas, y de aquellos que poseen una espiritualidad muy elevada, debido a que
corresponde al espíritu manifiesto. Junto con el púrpura, se asocia con la intuición,
la sensorialidad, la elevación y hasta la melancolía. Disminuye las sensaciones
de angustia, controla las fobias y reduce el miedo. Está en relación directa
con la ambición y se dirige especialmente al poder y el éxito. Fortalece la
voluntad de la misma manera que crea tensiones. Este color fue identificado en
los años 60 por el movimiento hippie, como el color de la muerte y renacimiento
del espíritu. Asociado con el amarillo, agiliza el poder creativo. Representa
el misterio, el poder y la realeza.
Personas
soñadoras, inspiradas y creativas, cuya mente es una fábrica inagotable de
ideas geniales. Admiradas por su estilo, se destacan en la moda, el diseño o
las artes. Dan rienda suelta a la imaginación, más se frustran ante trabajos o
actividades que no satisfagan sus deseos creativos. El reto consiste en
aprender a aceptar las diferencias y sentirse bien con los demás.
Marrón: Es el color de la
solidez y la fuerza. Simboliza la permanencia y perseverancia. También y más
frecuentemente, se relaciona con la certeza y la decisión, elimina la duda,
simbolizando lo comprensible y conocido, afectando positivamente a toda
energía.
Gris: Es el color de la
neutralidad y armonía. Favorece el despertar y la integración. Es la
combinación neutra y acumulada de todos los colores, por tanto, integra e
Iguala los efectos de todas las cosas y así, sólo influye con su tonalidad en
los efectos propios de los demás colores. Llega a expresar elegancia, respeto,
desconsuelo, aburrimiento, caducidad y vejez. Es un color sombrío que ayuda a
enfatizar los valores espirituales e intelectuales del individuo.
Blanco: Su significado es
asociado con la pureza, la pulcritud, la fe, la paz, la inocencia, la fe, la
verdad, la sinceridad y la alegría. En el ámbito de las culturas orientales
simboliza el acceso a la luz, la otra vida, el amor divino, estimula la
humildad y la unidad. Es el color que se usa en rituales de purificación, ya
que rompe con las condiciones adversas, además incrementa la fuerza espiritual.
Negro: Es bloqueador de lo
deprimente o negativo, aunque notorio, busca pasar desapercibido. Es un color
que denota sobriedad, misterio y el estilo. En occidente se asocia con la
muerte y el luto. Se relaciona con la oscuridad, la formalidad, la solemnidad,
la tristeza, la desventura, el enfado y la irritabilidad, representando lo
escondido o velado.
En
consecuencia se aprecia la gran importancia de la preferencia por ciertos
colores en la vida, así que ahora que se reconoce el poder de las vibraciones
de los colores, es posible aprovecharlas sacando el mejor partido posible.
Artistas y
diseñadores han estudiado los efectos del color por siglos y han desarrollado
una multitud de teorías sobre el uso de color. El número y variedad de tales
teorías demuestra que no pueden aplicarse como reglas universales. Por tanto,
la percepción depende de la experiencia individual.
Se considera que
la luz sustenta la vida y las demás funciones propias de los procesos vitales.
Por lo tanto, 'iluminación' en el mejor sentido de la palabra, es sinónimo de
exaltación simultánea del cuerpo, de la mente, del alma y el espíritu.
“El espacio está
lleno de luz y por tanto de color, sin embargo, de noche se ve oscuro”. Anónimo.
Los siete rayos
forman parte de un concepto metafísico común en la mayoría de las religiones y
doctrinas esotéricas que asocian la influencia de tales espectros, con el arco
iris. En Occidente, este concepto se identifica mayormente con el gnosticismo.
Fue a principios
del siglo XIX, cuando la teoría de la influencia de los siete rayos apareció
plasmada en forma más frecuente en las enseñanzas de la teosofía, en un primer
intento presentado por Helena Blavatsky y luego, reafirmada por los
planteamientos del maestro tibetano Djwhal Khul, apoyados sobre las creencias
propias del hinduismo tradicional.
Djwhal Khul
define los siete rayos, como siete diferenciaciones de un mismo gran rayo
cósmico, proveniente del sistema solar. Sostiene que los rayos cósmicos, se
originan en la Osa Mayor y se relacionan con las Pléyades, constituyendo éstas
su polo negativo, mientras que Sirio, actúa como el Sol Central que hace que se
equilibren tales radiaciones.
Los creyentes en
las doctrinas de Khul consideran que estos rayos cósmicos son similares a los
descubiertos por Robert Andrews Millikan (1858-1953) físico estadounidense,
quien fue galardonado con el Premio Nobel de Física en 1923, por efectos de su
trabajo que contribuyó a determinar el valor de la carga del electrón, junto
con el efecto fotoeléctrico, quien supletoriamente investigó, los efectos de
los rayos cósmicos.
Según Khul, las
proposiciones en que fundamenta su tesis sobre los Siete Rayos son:
ü Cada
vida de rayo, es la expresión de una vida solar, y en consecuencia, cada
planeta está vinculado con una vida planetaria del sistema solar.
ü Cada uno
de los rayos es receptor y custodio de las energías provenientes de los siete
sistemas solares, complementadas con las combinaciones, de las energías de las
doce constelaciones.
Empero en el
campo científico y a partir de la teoría electromagnética, se dio origen a un
descubrimiento que indica que la luz, es más que un campo magnético, ya que su
fuerza alterna cambia rápidamente y así viaja a través del espacio, en forma de
ondas.
En el campo espiritual, la Ley del
Color indica que cada tono percibido es un centro de atracción y en conjunto todos
los colores son complementarios o antagonistas unos de otros. Actúan como velos
para mimetizar lo que se halle detrás, haciendo en consecuencia que el
observador, se sienta atraído hacia la chispa inicial que expresa la cualidad
de atractividad de la vida central.
El color
equilibra, sana y tiene impactos de tipo físico, emocional y mental. Parte del
hombre está compuesta de color en el aura, campo que emana de la energía del cuerpo y
es guardada la debida proporción, semejante al campo magnético que rodea a la
Tierra. Se es color, tono, símbolos y velocidad de
vibración o luz.
Dicha aura puede dilatarse o contraerse, en
función del flujo de energía que se esté generando. Su propósito consiste en
soportar las corrientes magnéticas y eléctricas tanto del cuerpo como del
entorno, pues posee un sistema regulador interno que le ayuda a mantener la
homeóstasis del cuerpo, como propiedad de los organismos vivos, que consiste en
su capacidad de mantener una condición interna estable, tal como el nivel de pH
de la sangre, del sistema endocrino, del sistema nervioso autónomo, etc. El
Aura magnética, contribuye a mantener estas influencias en equilibrio en un
cuerpo sano.
Cuando hay enfermedad o aún preocupación, se
ven afectadas las vibraciones eléctricas del cuerpo, y el aura magnética se ve
afectada o deteriorada.
El aura tiene una forma ovalada que rodea el
cuerpo y va cambiando de color de acuerdo con los pensamientos, sentimientos y
emociones del sujeto.
Originalmente, los colores esenciales del
aura son, el azul, el rosa y el amarillo, aun cuando posee todos los colores
del arco iris que incluyen el naranja, verde, violeta, índigo y blanco, a los
que se suman tres colores más: dorado, bronce y plateado. Cada color se debe al
reflejo de ciertas emociones y sensaciones.
El más puro de todos ellos es el blanco, ya
que es el color que predomina en un aura sana, en plena en armonía con el Ser
interior y con la energía cósmica superior.
Cuando el vehículo Merkaba interior se
activa, produce una luz blanca que llena el aura, la purifica y la colma de
energía positiva. El blanco, es la suma de todos los demás colores, y por lo
tanto es la suma de todos los sentimientos positivos; es algo así como una
mezcla de fuerza, alegría, optimismo, amor y serenidad.
El aura blanca potencia la creatividad e
imaginación, que son propiedades del hemisferio derecho del cerebro. Las
personas que disfrutan de un aura blanca poseen una claridad mental muy grande,
lo que permite llevar una vida tranquila y sencilla, siendo posible para ellos,
superar cualquier problema que se presente.
“Muchos que
quisieron traer luz, fueron colgados de un farol”.
Stanislaw Jerzy Lec.
Fuente:
Mi libro: “UN SENDERO A LONTANANZA”.
Registro de Propiedad
Intelectual DNDA: 10-427-242
Autor:
Daniel García Vanegas.
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comentarios a mayorideas@gmail.com
ETIQUETAS:
Color, luz, energía, vibración frecuencias, ilusión, fuerza, tao, temor, miedo,
bloqueos, Ego, Entidad, Existencia, planeta, Crecimiento personal deontología,
axiología, Esoterismo,
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