LA ASTROLOGÍA (19)
“Las
constelaciones son grupos de innumerables estrellas, algunas pocas de ellas más
destacadas, a las que el hombre tradicionalmente les ha dado nombre y asignado
en su conjunto, un perfil o figura tomada al azar, a la cual le adjudica una
forma definida, todo ello para facilitar su posterior reconocimiento y así
poder ubicarlas en el cielo, ya que gracias a su distante posición repetida
cada día, aparentan estar fijas en la denominada bóveda celestial o firmamento”.
Dennis Heron.
La eclíptica es
la banda circular, órbita o plano, por el que se traslada la tierra alrededor
del Sol y su línea de tránsito resulta especialmente importante para la
astrología, ya que sirve como sistema referencial básico que permite medir la
posición relativa del planeta ante los astros, ubicación que resulta ser
aparentemente muy estable, en cuanto hace referencia fondo permanente del
panorama que ofrece la bóveda, gracias a la aparición diaria y sucesiva de las
denominadas ‘estrellas fijas’.
Hoy,
nuevas teorías astronómicas se unen a la serie de supuestos que explican las
órbitas y el verdadero movimiento del todo sideral. Explican por ejemplo cómo
la Tierra se está moviendo no exactamente alrededor del Sol sino que
simplemente lo acompaña en el gran movimiento dinámico espiral de traslación
que es propio del Sistema Solar en su totalidad que a su vez viaja en conjunto
con la Galaxia llamada Vía Láctea en pleno y en compañía de la enorme cantidad
de masa, materia y energía que conforma el sistema en pleno.
Desde hace
milenios la astrología y la astronomía se han dedicado a estudiar
prolíficamente el movimiento de los planetas alrededor del Sol, lo que ha
creado deliberadamente o no, una falsa impresión en las personas estudiosas,
dando la impresión de que se trata de un movimiento relativamente estático y
limitado del mundo.
Ahora se insiste
en que la Humanidad vive engañada pues acepta sin cuestionar los principios ya asumidos
que si bien desde tiempos de Copérnico logró trasladar la apreciación de la tierra
como eje central al Sol a un nuevo centro del sistema solar, o heliocentro, olvidando
por completo la real existencia del centro Galáctico, puesto que todo el
sistema planetario no obedece a un mecanismo concéntrico, sino que en realidad se
mueve siguiendo la forma de una espiral dinámica.
El Análisis de
éste nuevo movimiento, muestra a los planetas moviéndose de un modo
independiente al Sol,[1]
pues sus movimientos y trayectorias son mucho más complejas que el simple
movimiento circular-elíptico originalmente asignado, destacando que en realidad
no se ajusta plenamente a la ‘Teoría de Rotación’, la cual reza que ‘rotar es
sostenerse sobre un algo que a su vez gira alrededor de otro algo’.
La naturaleza y
trayectoria de rotación indica la existencia de una inmensa fuerza de energía
dinámica imperceptible o invisible que es la causante de hacer los objetos
rotar, Esta energía básica se asimila al movimiento propio de las ondas de
avance circular. En teoría, el movimiento básico del electrón se sostiene en el
mismo tipo de principio, por tanto, los planetas revolucionan bajo la acción de
esta clase de dinámica en la que la rotación en espiral acarrea en sí, el
movimiento de los objetos materiales.
Se propone
además que éste conocimiento resulta de suma importancia, pues los seres de
acuerdo con su actitud, también se mueven en círculos y/o en espiral,
movimiento que por ende, produce un diferente resultado. La comprensión de éste
fenómeno resulta importante hacia el entendimiento de la transición natural que
conduce al observador a cada una de las próximas etapas o dimensiones propias del
desarrollo del Ser.
De todas maneras,
sobre dicho fondo están catalogadas las constelaciones que para efectos
visuales desde el punto de vista de la tierra y por cuenta de la dirección que
lleva la rotación, funcionan en el sentido contrario a las agujas del reloj,
esto es, en oposición al movimiento del giro del planeta que como se ha visto ellas
son: Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, Libra, Escorpio, Ofibuco, Sagitario,
Capricornio, Acuario y Piscis.
Desde un remoto principio,
los tamaños, los colores y las formas de las constelaciones han sido fijados de
una forma caprichosa, hasta llegar a conformar un método aceptado por ser lo
convencional, aun cuando en realidad siguen siendo de dimensiones muy variadas
y de ninguna manera plenamente definidas.
Según la
convención más aceptada, desde un sencillo punto de vista terrestre, se acepta
la existencia de 88 constelaciones claramente delimitadas, cuyas posiciones son
establecidas por medio del uso del tradicional sistema denominado de
coordenadas estelares. En éste sistema de coordenadas, la posición de un planeta
se calcula usando dos números que bajo la forma de un método análogo, representa
algo similar a los sistemas utilizados para calcular las coordenadas
geográficas, que por método análogo son aplicados a la definición del espacio
sideral.
La llamada
latitud eclíptica, determina la desviación del planeta del círculo en cuestión,
y se mide en grados. La longitud eclíptica, se define midiendo en el sentido
contrario a las agujas del reloj, a partir de la dirección y distancia, de modo
que ambas, medidas son vistas desde la fijación del punto cero en la eclíptica,
denominado el equinoccio vernal.
La astrología occidental,
hoy toma valores entre 0 y 360° para seguir las estaciones y no usa el fondo de
las estrellas fijas como referencia, sino que divide la eclíptica en doce
segmentos iguales, de 30° cada uno, empezando desde el equinoccio vernal y
procede a asignar los mismos nombres tradicionales que originalmente fueron
establecidos para distinguir las imágenes guía de la antiguas constelaciones
zodiacales, empezando por Aries.
Otros sistemas
no occidentales de astrología, trabajan en alguna medida, con algunas técnicas
alternativas al sistema coordinado equinoccial eclíptico como ya se ha visto.
“Los
hombres son como los astros que unos dan luz de sí y otros brillan con la que
reciben”.
José Martí.
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Continuará…
Registro de Propiedad Intelectual DNDA: 10-427-242
Autor: Daniel
García Vanegas
ETIQUETAS: Astrología,
zodiaco, horóscopo, almanaque, calendario, mitología, retrospectiva,
cosmovisión, tiempo, sumerios, tradición, humanidad, historia.
Namasté…
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